PAPÁ
Papá, estoy aquí. No me puedes ver, pero seguro me sientes. Sé que todos los días me recuerdas y también sé que hoy mucho más. Papá, no sé si sabes que siento la misma pena que tú por no haber luchado lo suficiente para quedarme contigo, con vosotros. ¡Qué pena! Me hubiera gustado salir del hospital en vuestros brazos, como años después hizo mi hermana. Papá, todos los días os cotilleo entre las nubes y me gusta lo que veo….