NO NOS VEN
Mientras caminaba por el andén el señor del maletín me golpeó. No me hizo daño pero si me asustó mucho. Apreté fuerte la mano de mi papá para no perderle, para no caerme. Los mayores siempre corren, siempre tienen prisa y no nos ven. Me asustan y no me gustan porque se enfadan y nunca sé que he hecho mal. Bueno, no todos los mayores. Los que van sentados dentro del vagón si me gustan porque siempre quieren saber mi nombre, cuántos años tengo y si tengo hermanos. Solo ellos nos ven.
**Relato escrito para el Concurso de Metrorrelato