LA VOZ
— Si salto, ¿caeré o volaré? — preguntó en voz alta mientras pasaba por encima del muro que separaba la prudencia del atrevimiento.
— Seguro volarás. — le dijo una voz en su interior que él reconoció como familiar.
— ¿Cómo puedo estar seguro? — interpeló mientras daba un nuevo paso hacia el borde del edificio.
— Probando. Haciendo. Saltando. — le contestó la voz.
— ¿Y si caigo? ¿Y si me mientes? — dudó mientras dejaba ambos pies al borde.
— Si caes, todos desapareceremos. Tú, yo, esta voz que te persigue y no te deja. — respondió la voz.
— Y si vuelo, ¿te irás? ¿me lo prometes? — interrogó de nuevo.
No hubo respuesta.
Disparador creativo: Microrrelatosies