AL DESCUBIERTO
Él, con peluca tan rosada como rizada, la cara maquillada con coloretes rojizos, intentando parecer gracioso con una nariz roja de gomaespuma que no se sostenía en su minúscula nariz. Las ropas anchas, coloridas y unos zapatos enormes que le hacían chocar con cualquier esquina y tropezar a cada paso. El payaso torpe. Ella, con sombrero pirata a la cabeza, el parche tapando su ojo miope y la ropa queriendo simular una sexy pirata de pacotilla. En la mano sostenía…