EN BUCLE
Estoy en un ataúd con setenta y cinco años y nada me puede sorprender. Bueno, estar aquí despierto si. No me lo esperaba. Avanzan los días y llego a mi fiesta de jubilación. Me felicitan. Yo feliz de saber que tengo diez años más de libertad. Pasan los años. Tengo treinta y dos y acuno a mi hijo. Le quiero. Sé que será muy feliz. Sigo avanzando. Al colegio. No será memorable pero si tendrá buenos momentos. Cada vez soy…