DESPEDIDA
Un parpadeo y esquivó una última mirada. Bajó la cabeza y salió de la habitación. No hubo más. Evitó volver a cruzarse con ella mientras recogía todas sus cosas de la casa. Se encerró en el baño y, ahogando el llanto en la primera toalla que pilló a mano, lloró un río por ella. Sentía el corazón hecho pedazos, las ilusiones destrozadas y el futuro tan incierto que la aterrorizaba. El temor a la soledad, los planes más cercanos que…