VICTORIOSA
Las seis de la tarde y el día no había hecho nada más que empezar para Adriana. Enfermera y deportista a partes iguales. Los turnos agotadores no ayudaban en nada a su preparación pero haber pasado ya los cuartos de final y la semifinal la tenían completamente motivada para que, esta vez, el título fuera suyo. Había peleado tanto. No solo en el ring, sino en la vida. Hacer compatibles entrenamientos y turnos cambiados no resultaba especialmente fácil, pero ella…